Haz esta bonita oración de entrega del día en sus manos porque cuando Él toma tu vida tienes bendición, fuerza y prosperidad.
Bendito Dios, en este día me levanto con más fuerzas que ayer para seguir por Tu camino, no tendré miedo en el camino que tienes preparado para mi, porque tú vas conmigo, gracias por Tu fuerza y valentía que me das para seguir adelante. Gracias por un nuevo amanecer y por depositar aliento de vida en mis pulmones.
Padre amado, en Tu Nombre, rompo en este nuevo día toda misión del enemigo en contra de mi economía, que toda pobreza se aleje de mí, toda duda y fracaso, toda enfermedad que haya en mí y en mi familia. Padre Amado, buscaré tu reino y tu justicia para que todo lo que haga venga por añadidura tuya.
Limpia mi alma y mi cuerpo, y que este día, sea un día de liberación; libérame de toda cadena heredada del pasado, libérame de toda maldición transgeneracionales, limpia mi camino con Tu poder y rociarla con tu dulce aroma, que transmite paz y tranquilidad.
Padre Celestial, dame la sabiduría para poder enfrentar toda piedra de tropiezo que se ponga en mi camino. Y ayúdame a ser valiente, frente a las piedra que me arroja el enemigo, dame un día de gozo, de fortaleza, de alegría, de abundancia, y sobretodo permiteme agradecerte por cada una de las cosas que me das.
Señor, sé que a veces te he fallado, hoy te pido perdón, te ruego que me limpies y me renueves con tu Espíritu, dame nuevas oportunidades para hacer las cosas bien, como a ti te agradan y te honran. Padre, dame salud y bienestar, y así poder disfrutar de la prosperidad económica que me darás, por eso también imploro tu protección.
Cúbreme con tu manto de luz y líbrame de todo mal que quiera acercarse, que cada día me ilumines con tu luz y me llenes de energía y voluntad para atender mis obligaciones, protege a los que amo y poder caminar por el camino que tú quieres que alcance mis sueños.
Hacer esta oración con fe y esperanza, haz peticiones y termina honrado a Dios por todo lo que Él es para ti, pídele que guíe tus pasos en tu día a día, que te proteja de todo mal que quiera acercarse a ti, para así poder cumplir las peticiones de tu corazón.